En todas sus propuestas, Pilar incluye sólo
productos chilenos de la mejor calidad con el
concepto “kilómetro cero” (ingredientes
provenientes de productores conocidos y
cercanos al estudio). De hecho, en el próximo
Ñam Santiago presentará una sal, “es uno de
los pocos ingredientes que tiene Chile que es
precolombino. Es la sal de mar de Cáhuil, Lo
Valdivia, salinas reconocidas con denominación
de origen, ubicadas en la zona costera de la
sexta región, entre Pichilemu y Paredones, con
más de 400 años de antigüedad”.
Entre otros planes que Pilar Rodríguez
tiene en mente, destaca el próximo
lanzamiento de su libro “Terruño chileno, un
romance entre comida y vino” (con
fotografías de Araceli Zúñiga), sobre las
cuatro regiones de nuestros vinos y sus
recetas; y varios proyectos en el área, donde
su eje siempre es y será que la cocina de Chile
se destaque en el mapa gastronómico.