domingo, 25 de marzo de 2007
DE LAS CUEVAS Y DON ANTONIO DE PETREL.
Una de las cuevas célebres que he conocido es la del caudillo chileno José Antonio Pincheira, en realidad de los cuatro hermanos Pincheira. Ellos y sus subordinados mantenían en secreto sus refugios, tanto en territorio chileno como argentino, hoy se conocen dos de los más importantes, uno se ubica próximo a la ciudad de Malargue, en el sur de la provincia de Mendoza y se denomina Los Castillos de Pincheira, dado a la monumental apariencia de construcción megalítica que ha adquirido la roca del farellón de la ribera sur del río de Las Pampas, por la acción erosiva natural de las lluvias y los fuertes vientos que lo azotan. A través de centenares de metros se pueden apreciar las innumerables cuevas que albergaban a la temida banda de los Pincheira. Con el relato del naturalista inglés, Charles Darwin(ese viejo conocido), nos aproximaremos a la idea que se tenía de ellos alrededor de 1834, él se encuentra en la cima de la cordillera de los Andes, cerca del nacimiento del río Cachapoal,”Por uno de esos barrancos penetró Pincheira en Chile para saquear toda la comarca vecina. Ese mismo cacique que atacó una estancia a orillas del río Negro, ataque del que ya he hablado. Pincheira es un renegado, mestizo español, que reunió una gran tropa de indios y se estableció a orillas del río de Las Pampas, establecimiento que jamás han podido descubrir las tropas enviadas en su persecución. Partiendo de ese punto, y atravesando las Cordilleras por pasos desconocidos, se dirige a saquear las estancias y, apoderándose de los rebaños de éstas, los conduce a su secreta morada. Pincheira es un jinete de primer orden, así como todos sus compañeros, por que él tiene por principio invariable romperle la cabeza a cualquiera que no pueda seguirle. Contra ese jefe de bandidos y otras tribus indias errantes es contra quienes Rosas hacía la guerra de exterminio de que hablé en el capítulo V”.
En Chile se habló de la “guerra a muerte” y de este mismo modo tituló don Benjamín Vicuña Mackenna un grueso volumen dedicado a ese período desde donde elegiremos algunos fragmentos, para complementar, los comentarios de mis visitas a ambas “cuevas” o lo que he logrado en dichas visitas de las esquivas cuevas, ya que éstas, en varias ocasiones no han sido accesibles a la primera.
La “Cueva de los Pincheiras”, es un alero rocoso socavado por acción natural, al pié del gran farellón de basalto que se eleva a más de cien metros de altura en la ladera sur del boscoso cajón que hoy aloja la ruta pavimentada hacia Los Nevados de Chillán, en el kilómetro 67. La pared de este acantilado es casi lisa y cae verticalmente al valle, es inexpugnable, en el borde de su cumbre se divisa un cordón arbóreo de especies nativas. Por este paredón, aún hoy en la época de los deshielos, se forma una extensa y copiosa cortina de aguas ocultando “la cueva” que otrora sirvió como uno de los refugios a la “gavilla de los Pincheiras”.
A fines de la colonia e inicios de la república, esta boscosa área se encuentra bajo la propiedad de un importante y furibundo realista, don Manuel Zañartu, dueño de la hacienda de Cato, donde los progenitores de los Pincheiras, son inquilinos y hombres de confianza del patrón, quien los ampara y estimula.
Conocedores o vaquianos de las serranías de Cato, los Pincheiras, convirtieron la zona en su refugio natural. Antonio, el mayor de los hijos de Martín, es soldado del ejército realista y hoy es la batalla en Maipú, de ahí huye tras la derrota y del abandono que su comandante en jefe, Mariano Osorio hace de sus tropas. El jefe huye por el camino de la costa. Sabemos que el guía proporcionado a éste y su escolta en la hacienda Bucalemu, los conduciría a salvo hasta Cáhuil. Al descender desde Millaco hasta la boca del Nilahue por un estrecho y tortuoso camino flanqueado por cipreses, a la hora más oscura de la noche, antes del amanecer, ahí, en uno de esos recovecos, desapareció el guía. Solos, Osorio y sus propios, prosiguen su derrota, esta vez hostilizados constantemente por las guerrillas de costinos patriotas.
Mientras, los restos de las fuerzas realistas, huyen en desorden y al, sálvese quien pueda. El cabo Antonio Pincheira, es uno de ellos, su astucia y su genio lo conducen a salvo al reducto de toda su vida, a donde la autoridad patriota lo compele.
Proscrito, se entrega de lleno a sus correrías, pliega a sus hermanos; Santos, Pablo y José Antonio, más una abigarrada compañía de campesinos, delincuentes, mestizos, pehuenches, desertores del ejército patriota y restos de sus compañeros de armas en las filas del rey.
Desde su base de Cato, asolaron los campos y pueblos comarcanos, el favor de los hacendados, inclinó la acción de estos hombres a actuar en coordinación con otras fuerzas comandadas por caudillos realistas, como; Vallejos, Pico, Mariluan, el cura Ferrebú, el renegado Vicente Benavides. Realizan operaciones de distracción del ejército patriota y el asalto, toma y saqueo de Chillán, San Carlos y otros tantos, también, cuando es menester, traspasan por los boquetes cordilleranos hacia las pampas argentinas del sur de Cuyo. En las mismas cercanías del fuerte de Malargue, los Pincheiras establecen su malal, se albergan en los aleros rocosos del farellón del río de las Pampas. La acción erosiva de las lluvias y el potente viento que asota el acantilado,
con el tiempo, ha labrado decenas de pequeñas cuevas. Su uso y la comunicación de unas con otras, tejió una red de senderos que los conectan con rapidez a la cumbre y poder replegarse con seguridad en caso de un ataque de las fuerzas cuyanas.
Hoy día, los llamados “castillos de Pincheira”, son apreciados desde lejos por su imponente presencia, similar a una mega construcción medieval y pueden ser visitados y recorrerlos palmo a palma tras las huellas de los saqueadores de la estancia de Río Negro.
El carácter del accionar de las fuerzas de Pincheira, la demostración de crueldad y los fines que sirvió, es lo que llevó a clasificarlos por el uso y costumbres como una “gavilla” o “banda” que actuó durante la llamada “guerra a muerte”.
LA CUEVA
San Antonio de La Cueva está en los 34*14`71``
sábado, 24 de marzo de 2007
martes, 13 de marzo de 2007
La sal es uno de los minerales que más abunda en la Tierra. Su nomenclatura química, Cloruro de Sodio, se debe a sus dos iones componentes: cloro y sodio. La estructura de este compuesto, es un cristal con forma de cubo, en la que los átomos de cloro y sodio, dispuestos alternadamente, forman una red cúbica que se va repitiendo con la misma orientación en toda la sustancia, formando una red cristalina.
La sal no sólo sirve para sazonar. Sus iones son fundamentales para la transmisión de impulsos nerviosos, para los latidos del corazón, para la contracción muscular y para desencadenar una respuesta inmune. ¡La próxima vez que aliñen una ensalada, piensen en esto!
Nicolás Yutronic Sáez, QuímicoLicenciado en Química, Pontificia Universidad Católica de ChileDoctor en Ciencias Naturales, Universidad de Stuttgart, AlemaniaProfesor Asociado Facultad de Ciencias y Facultad de ArtesUniversidad de Chile
¿Quieren saber más?
La sal de mesa o cloruro de sodio, de fórmula química NaCl, es el compuesto iónico más común. Es un sólido blanco, cristalino y soluble en agua, constituido por dos iones: Na+ y Cl-. A pesar de tener 2 componentes, la sal es totalmente diferente a cada uno de ellos por separado: el sodio es un elemento metálico y el cloro es un gas diatómico tóxico; y ambos presentan una violenta reacción al contacto con el agua. Los iones Na+ y Cl-, sin embargo, no experimentan tales respuestas. Si agregamos cloruro de sodio al agua, no se produce otra cosa más que su disolución, hecho que también podemos apreciar al adicionarlo a nuestras comidas. El análisis de difracción de rayos X, muestra que el NaCl posee una estructura cristalina cúbica centrada en las caras, en la que los átomos de cloro y sodio se encuentran dispuestos en forma alternada. Este arreglo se repite con la misma orientación a lo largo de toda la sustancia, conformando una red que define un cubo de una longitud de 5,63 angstroms (Å) por lado. Para tener una idea, sólo 1 centímetro es igual a 100 millones de Å.Este entramado es también característico en la mayoría de los halogenuros alcalinos como el bromuro de potasio, KBr, que, lógicamente, debido al mayor tamaño del ión potasio, describe un cubo de aristas más largas: 6,59 Å. El número de iones de signo contrario que se encuentra alrededor, por lo tanto, es igual a seis. La forma del retículo cristalino, dependerá de la relación entre los radios de los iones positivos y negativos. Así, cuando el catión es muy grande, como es el caso del Cs+, éste podrá rodearse de más iones negativos (8) y, entonces, la estructura tendrá una forma de red cúbica, pero centrada no en sus caras, sino en su cuerpo.
domingo, 25 de febrero de 2007
VINO COLCHAGUINO
Es extensamente conocido el enorme éxito que año a año los vinos provenientes de los viñedos colchaguinos tienen en los certámenes más prestigiados del planeta y por ende entre consumidores cada vez más exigentes. La degustación y el beber bien es todo un arte que se aprende con la práctica, bebiendo buenos vinos y conociendo información fidedigna acerca de los procesos necesarios para su producción.
Del mismo modo que para conducir un automóvil, no se requiere ser un experto en motores de combustión, sin embargo unas lecciones de conducción y algunas nociones de mecánica son esenciales a la hora de conducir con seguridad y agrado, esa práctica, en definitiva, es la mejor maestra.
Asimismo, para disfrutar un buen vino no es imprescindible un conocimiento acabado sobre vitivinicultura, pero la comprensión de los principios básicos y algo de su historia, son fundamentales para apreciar el vino como algo más que una bebida corriente.
El cultivo de la vid y su vinificación en Colchagua, no se inició con el reciente fenómeno que vive hoy, vamos a hablar de eso, de los viñedos de rulo o del secano costero, de los viñedos de Cáhuil, pero antes, daremos un vistazo a lo que fue la vid y el vino en culturas remotas.
LA VID Y EL VINO, UNA MIRADA AL PASADO.
Los restos fósiles más antiguos de Vid han sido encontrados en diversos puntos geográficos de la península Itálica. Pertenecen a la era cuaternaria, hace unos tres millones de años. Hoy día existen alrededor de cien variedades y subespecies de Vitis Vinífera, las cuales tienen como antecedente más remoto en vitis neolíticas del area Transcaucásica (Georgia, Armenia y Azerbaiján), de unos 10.000 años, antes del presente, según restos datados con radiocarbono 14.
En Irán, excavaciones arqueológicas descubrieron seis ánforas que contenían residuos de vino tinto. Este sitio fue fechado en 7500 años antes del presente y se llama HAJJI FIRUZ TEPE.
Además, han sido encontradas ánforas con residuos de vino en la tumba de Tutankamón, las que fueron estudiadas por científicos españoles.
El comienzo de la vitivinicultura en francia es un tema controvertido, hay quienes afirman que el hombre de Cromagnon pintó en las Cavernas de Lascaux, escenas relativas al vino y la vid. La ocupación de Lascaux, fechada con radiocarbono 14 datan entre 15.000 a 9.000 años A.P.
Junto con los restos arqueológicos, contamos con numerosas referencias en el arte;(ya mencionamos pinturas murales), existen grabados, inscripciones, menciones en la literatura religiosa y profana, tradiciones orales..etc.
En Egipto se cree que Osiris enseñó a los ciudadanos de Nyra y de ahí se propagó a Menfis y Tebas. Más tarde, papiros de unos 4.000 años A.P.. prescriben el vino como medicamento eficaz para el asma y la melancolía.
En la Ilíada se relata cómo los médicos Maqueón y Podalirio, hijos de Esculapio, lavaban con vino las heridas de los guerreros caídos durante el sitio de Troya. Hipócrates lo usaba para curar fiebres y Cicerón lo aconsejaba para alegrar pacientes deprimidos. Virgilio en los versos de su libro Georgias, cita la existencia de viñedos en Methyme, Lesbos y Pysthie. Los griegos tenían un dios del vino, Baco.
En la India se practicaba la viticultura antes que en Fenicia, en una época indeterminada, y se cree que los Fenicios introdujeron este cultivo en España.
Relatos Chinos cuentan que hace unos 4.000 años, un Señor Yu, introdujo el uso del vino y por esta razón fue desterrado por el Emperador. Más tarde las cosas cambiaron respecto del vino y…, “dos coperos escancian el vino tomándolo de una enorme fuente de oro y el Señor alza su copa, todos los barones y damas se arrodillan ante él. Cuando el Gran Kan bebe, los instrumentos se ponen a tocar, teniendo en cuenta que los hay en abundancia.”
En Persia se le atribuye a Samschid el invento del vino. La versión más conocida, es talvés, la de la biblia y que atribuye a Noé y su familia el descubrimiento o invención del vino cuando finalizó el diluvio.
Para los Sicilianos la fabricación del vino se inició unos 4.000 años A.P. y de ahí pasó más tarde a la península, a Etruria y Roma. El vino romano también tiene dios o dioses,
serían Liber y Dionisios.
Con todo, el conocimiento actual indica que el cultivo de la vid y la vinificación se produjo primero en tierras del Oriente y desde ahí se difundió a Occidente a través del Mediterráneo, aproximadamente unos 4.000 A.P. El gran apogeo de su difusión ocurre de la mano de la expansión del imperio romano, unos 300 años A.C., con Alejandro Magno.
La primera región del llamado continente Americano, descubierta por navegantes nórdicos fue Groenlandia, geológicamente, parte de Norteamérica. El Islandés, Eric el Rojo exploró y colonizó la isla por primera vez y quien divisó una porción del continente, fue Bjarni Herjólfsson, un comerciante Islandés desviado de su ruta por inclemencias del tiempo durante la navegación entre Islandia y Groenlandia, alrededor del año 986 de nuestra era. Luego, el Afortunado, Leif Erickson realizó un viaje a la tierra del continente, donde halló trigo silvestre; como también vides. Estas tierras las denominó el Vinland. Esto es la Tierra del Vino. En algún lugar de la Costa del Labrador y Nueva Escocia, o una faja litoral sita quizás aún más al sur; Boston, Massachussets, Nueva Bedford, Nantucket o Marthas Vineyards.
La información de las Sagas Islandesas han sido verificadas por el descubrimiento arqueológico de una ocupación del tipo Nórdico en L`Anse-aux-Meadous, en el Golfo
De Terranova, en 1963. Las ruinas datan aproximadamente del año 1.000 D.C. y se les llamó Las Cabañas de Leif.
Los escandinavos, “Sentían debilidad por el vino, les gustaba tanto el enervante licor como al oso la miel, y eran capaces de recorrer enormes distancias con el único fin de apoderarse de vino en abundancia”. Mientras tanto en las primeras décadas del segundo milenio, Europa padeció una serie de graves miserias, desgracias y anarquía. Para poner fin a este estado de cosas se acordó un pacto al que se le llamó “la tregua de dios”, el que en algunos de sus numerosos artículos dictaba, “No cortaré ni arrancaré ni vendimiaré las vides de otro bajo pretexto de guerra, a no ser que estén en mi tierra”.No quitaré el vino a quienes lo lleven en su carro, ni a los bueyes que tiran”.
Los Vikingos, vinificaron en América, 500 años antes que los españoles llegaran junto con Cristóbal Colón, el que por cierto había realizado un viaje a Islandia en 1477 y conocido probablemente las tradiciones nórdicas.
“Ya Colón, el gran Almirante, en su segundo viaje comunica a la Corona: “…y de unos pocos sarmientos que se pusieron, es cierto que no hará mengua el Andalucía ni el Sicilia aquí”. Estas son las primeras noticias de las cepas Europeas transplantadas al nuevo continente.
Con la importancia del vino en la liturgia cristiana, fue necesario el cultivo y vinificación de la vid, tarea que asumieron generalmente los monasterios. En tanto, el califa Abderrahmán, los últimos años de su reinado los pasó en su retiro encantado de Medina Al-Zahara. “Pasaba las horas en las sombras apacibles de los bosquecillos, que ofrecían mezclados racimos de uvas, naranjas y dátiles”.
Un poema en los muros de La Cava (Mu Allaqat) dice del modelo de héroe del desierto, “Yo he bebido mucho vino, tras caer el calor, pagándolo con reluciente acuñado, en ocre vaso, estriado, emparejado con brillante botella, a la izquierda, tapada…. Más, cuando bebo, solo consumo mi dinero, e integro queda mi honor, sin mella; y al pasar la embriaguez, mi liberalidad no disminuye:”
Entre los siglos XII y XVI, la producción de vino se generalizó en Europa, siendo Francia uno de los principales exportadores, sin embargo varios de los que hoy son los mejores viñedos de Burdeos, empezaron a ser desarrollados por sus aristocráticos propietarios a finales del siglo XVII y principios del siglo XVIII..
La vitivinicultura se practica en Chile desde la segunda mitad del siglo XVI, reflexionar acerca de los rasgos principales del inicio de este fenómeno exige indudablemente conocer la dinámica de los sucesos históricos generales. De modo que ilustren los escasos datos específicos sobre la vid y el vino que contienen los documentos del inicio de la conquista hispana en el territorio del actual Chile.
LOS VIEJOS DE CAHUIL
Mis afectuosos saludos y el deseo de que tú y familia estén bien.
Hector, he tomado contacto con arqueólogos de Monumentos Nacionales por el tema del hallazgo de Cáhuil y conocí el informe. Creo que es de la mayor importancia y que esto debiera tener una
divulgación adecuada através de una exposición fotográfica de la piezas recolectadas y en lo posible la creación de un museo en Cáhuil que albergue una muestra significativa y hacer un foco de interés para visitar la zona. Este sitio, por su antiguedad pasa a ser un recurso relevante que tu podrías implementar, quizás estés trabajando en eso, me gustaría que así fuese.
Atentamente, tú amigo, Antonio Saldías G.
CHARLES DARWIN
Charles Darwin, joven naturalista inglés se embarcó en el bergantín Beagle bajo el mando del capitán Robert Fitz Roy, la nave zarpó desde el puerto de Davenport en Playmouth en los días finales del año 1831 para llevar a cabo una expedición que duraría aproximadamente cinco años.
Uno de los impactos más notables de aquel viaje, fueron las conclusiones de Darwin sobre el tema de la evolución del hombre, todo un vuelco en el conocimiento, solo desmentido por el fanatismo religioso.
Rigurosamente, Darwin escribe su Diario de un naturalista alrededor del mundo y de la publicación de éste, resulta más que obvio, que realiza el mismo recorrido que Gay unos años antes, y no por casualidad sino por que así se programó para acceder a los mismos fenómenos y lugares de interés y esta certeza me permite presumir, que de no mediar una repentina enfermedad que acusó en las inmediaciones de Mallermo, Charles Darwin habría concluido esa expedición específica, en Cáhuil, del mismo modo que don Claudio Gay.
Según el acompañante de Darwin, John Meehan, quien nos da una visión más sensitiva y humana de su ilustre coterráneo, éste no hizo caso de una advertencia del vaqueano Mariano González para que se abstuviera de probar unas empanadas junto con un generoso vino y chicha ofrecido por un matrimonio de campesinos, quienes prepararon para festejar las fiestas patrias, dicha comida típica, todo hecho en casa.
-Tengo un estómago firme, señor, y estoy acostumbrado a esta comida y bebida –explicó entre dos bocados-. Nunca me hacen daño. Pero usted, señor, debiera tener más cuidado. Usted es europeo.
-¿De qué están hechas estas empanadas?
-Es una masa señor, llena de carne y cebollas, algunas aceitunas y a veces un huevo. Es la comida favorita de nuestro pueblo.
Darwin mordió la empanada con mucho entusiasmo y el guía hizo lo mismo. Terminó su empanada, bebió vino de fabricación casera y aceptó una copa de chicha, bebida hecha de uvas, más parecida a la sidra que al vino, no obstante su consistencia algo espesa.
Al día siguiente, cuando se retorcía de dolor, Darwin recordó las advertencias de su guía. Pero entonces era demasiado tarde. Sintió como si un fierro al rojo estuviera explorando en la maraña de sus intestinos. Se revolvía, quejándose, como si las púas de la saeta se retorcieran y movieran con saña.
Martens, otro de los acompañantes, reflexionaba, no encontraremos un doctor por estos lugares, la única cosa que se puede hacer es tratar de regresar a Valparaíso tan pronto como sea posible, pero si pudiéramos llevarlo a la casa de Corfield sería mejor.
El día 20 Darwin, se encuentra en “La Cueva del Obispo”, -uno de los nombres que se da a la caverna situada en la hacienda San Antonio de La Cueva- y no obstante su enfermedad estudia y recolecta numerosos fósiles de fauna marina extinta, en este miembro de la llamada “Formación de Navidad”. Continua su viaje, presuntamente, Topocalma, según el académico chileno José Frutos, quien sobre la base de datos morfológicos, paleontológicos y litológicos proporcionados por el mismo Darwin, uno de los sitios visitados por éste sería la Rada de Topocalma, al sur de Navidad.
La Formación de Navidad corresponde a la Era Terciaria, y en esta formación son evidentes la estratificación de dos períodos geológicos; Plioceno (13 millones de años) y Mioceno (25 millones de años).
Darwin dice, “la arenisca contiene fragmentos de madera al estado de lignita o parcialmente silicatada, dientes de tiburón y conchas en gran abundancia. Ya en la parte superior o inferior de los barrancos marinos son muy numerosos en ejemplares los géneros pectúnculos y oliva y las siguen las turritelas y fusas. Recogí en un pequeño espacio las siguientes treinta y una especies, todas las cuales son extinguidas y varias cuyos géneros no llegan actualmente tan al sur”. Las mencionadas especies fueron clasificadas en Inglaterra por el especialista, Sowerby.
Detecta también el fenómeno del “solevantamiento de las costas”, producido por grandes e intermitentes movimientos telúricos durante eras geológicas pasadas y al que han contribuido también, recientes terremotos, temblores y maremotos, determinando el actual relieve costero, la formación de acantilados, lagos y lagunas.
Incesante Charles Darwin, no pudo resistir este otro bocado, materia de su estudio. Mil fuegos lo doblegan, su estado de salud es insostenible, desde Navidad marchan en demanda de Valparaíso para su urgente atención, llegando a esa el día 27 sobre en un carruaje dispuesto por un hacendado para el enfermo ya exhausto.
Dice Meehan, poco feliz la manera de terminar tan interesante e instructiva excursión, y yo agrego con insistencia, si no mediara aquella caldúa y el vinito “patero”, hubiera seguido Darwin con el “curso lógico”, su excursión, tomando en la Boca del Rapel, dirección al sur, tal como hizo Claudio Gay unos años antes, y llegar hasta la Boca del Nilahue, en Cáhuil y yo estaría gritando hoy esta ilustre visita como si fuera un gol. Talvés.